El primer hogar que se contó en el Censo del 2020 está en Toksook Bay, una aldea rural de Alaska en el mar de Bering.
El conteo empezó de manera oficial el martes 21 de enero, casi dos meses antes de que comiencen a responder el resto de los 50 estados de los EE. UU., el Distrito de Columbia y cinco territorios de los EE. UU. (Puerto Rico, Samoa americana, la Mancomunidad de las Islas Marianas del Norte, Guam y las Islas Vírgenes de los EE. UU.). El director de la Oficina del Censo, Steven Dillingham, ayudó a poner en marcha el conteo, siguiendo con la tradición de que el director es quien cuenta personalmente el primer hogar.
El conteo anticipado surgió de la necesidad: Mientras que gran parte de los EE. UU. responderá al censo en marzo y abril, los meses de la primavera pueden presentar retos para contar a las personas en aproximadamente 220 aldeas y comunidades remotas de Alaska.
“El plazo de marzo-abril se encuentra justo alrededor de lo que llaman ‘la ruptura’, que es cuando la nieve comienza a derretirse y los ríos que se congelan durante el invierno empiezan a deshielarse y romperse”, dijo Wendy Hawley, quien ha ayudado a supervisar el conteo ahí. “Realmente es una época muy difícil para viajar en la Alaska rural”.
Eso se debe a que existen dos formas principales de llegar a las aldeas de las extensas áreas poco pobladas de Alaska que no se conectan por un sistema oficial de carreteras. La primavera es una época difícil ya que el descongelamiento del hielo puede ser peligroso para el aterrizaje de los aviones y la navegación de los barcos.
“Por lo general, enero-febrero es una época segura para viajar”, dijo Hawley. “O esperar hasta junio o julio, lo que no es conveniente debido a las limitaciones de tiempo para entregar el conteo al presidente el 31 de diciembre”.
Hawley trabajó como gerente de área del censo para el conteo decenal en el oeste de Washington en el 2000 y 2010. En 2010, su territorio se expandió para incluir Alaska, donde las temporadas de pesca de primavera son otra razón por la cual el conteo debe realizarse con anticipación.
¿Sabía que?
Más del 90% de los hogares en Alaska seguirán la misma línea cronológica que el resto de los Estados Unidos. A partir de mediados de marzo, se les invitará a responder al Censo del 2020 por internet, por teléfono o por correo.
“Diría que hay mucho orgullo entre el equipo, entre los habitantes de Alaska. Saber que estás dando inicio a todo el censo para el resto del país, es increíble. Es muy impresionante.”
—Wendy Hawley, 2010 gerente de área del censo de Alaska
Comenzar el conteo en enero también ayuda a que la Oficina del Censo llegue a las personas antes de que salgan de cacería o de pesca, o se vayan a trabajar a lugares cálidos. Dichas salidas pueden dificultar que haya un conteo preciso en los días previos al 1 de abril, el día de referencia del Censo del 2020. Los empleados de la Oficina del Censo se coordinan con los líderes de las aldeas y comunidades para contratar a censistas locales y organizar los horarios de visitas. Después, los censistas contratados localmente realizan el conteo en persona.
Hace diez años, el 25 de enero del 2010, Hawley ayudó a la Oficina del Censo a poner en marcha oficialmente el Censo del 2010 a unas 450 millas al norte de Toksook Bay, en Noorvik.
En el 2010, una comunidad principalmente esquimal Inupiat, con una población de 668 personas, se reunió para apoyar el evento en Noorvik. Después de volar hasta la pista aérea de Noorvik, el entonces director de la Oficina del Censo, Robert Groves, fue llevado al pueblo y comenzó el conteo entrevistando al habitante de mayor edad de la ciudad, un veterano de la Segunda Guerra Mundial.
Hubo presentación de baile, comida de la región y presentaciones de los líderes de la aldea, de funcionarios del gobierno del estado y de la Oficina del Censo. El evento se llevó en una preparatoria local, que también hospedó a los representantes de los medios de comunicación y otros funcionarios. Esa semana, el clima se mantuvo en gran medida por encima de cero grados Fahrenheit.
Durante las siguientes semanas, los censistas usaron motos de nieve y avionetas para llegar a los rincones distantes de un estado dos veces más grande que Texas y cinco veces más grande que California. Finalmente, el Censo del 2010 contó a 53,930 personas en las áreas remotas de Alaska.
Para Hawley, los recuerdos de sus dos años dirigiendo esos esfuerzos siguen vivos. Ella recuerda ver a los caribús correr por la ventana de una avioneta que volaba casi a la altura de los arbustos. Recuerda estar de pie viendo la extensa tundra al borde de Russian Mission, la primera aldea que visitaron.
Afuera de una escuela de bachillerato, se veía un panorama interesante. No había bicicletas encadenadas ni autos estacionados en un lote. Solo había motos de nieve alineadas, y una escultura de hielo de Santa Claus, que sostenía un letrero que decía: “Hágase contar”.
“Diría que hay mucho orgullo entre el equipo, entre los habitantes de Alaska”, dijo Hawley. “Saber que estás dando inicio a todo el censo para el resto del país, es increíble. Es muy impresionante”.